El 20 de julio de 1861, durante una sesión de espiritismo, la artista Georgiana Houghton (1814-1884) pidió a los espectros un favor: que su hermana Zilla, una consumada dibujante fallecida años atrás, la empleara como médium para crear obras artísticas. Los espíritus respondieron negativamente. Imposible. Houghton pasó a la segunda opción, su hermano Cecil. Tampoco […]
a través de ¿Y si el arte abstracto lo inventaron dos mujeres espiritistas? — La esencia misma del Misterio